EL CENTRO "SHALOM"

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El Centro Shalom para la Resolución de Conflictos y para la Reconciliación, tiene sede en Nairobi, Kenia. Fue fundado en el 2009. Su objetivo es ayudar a resolver conflictos y favorecer la reconciliación promoviendo una transformación social no violenta, un desarrollo integral del ser humano y el respeto por la cultura local, las tradiciones y la justicia.

 El Centro Shalom concentra su trabajo en el árido terreno del norte de Kenia, donde la comunidad de los pastores nómades, desde muchos años, está implicada en conflictos. En ésta región conviven diversos grupos étnicos que se disputan un territorio reivindicado por Kenia, Etiopía y Sudán. Se originó una situación en que el Estado estuvo más bien ausente, dando por resultado un pobre desarrollo de la zona.

Con el paso del tiempo el Centro Shalom amplió sus competencias a fin de incluir la organización del desarrollo regional IGAD (Autoridad Intergobernativa para el desarrollo).

Esta región es una zona que se caracteriza por episodios de conflictos violentos de larga data entre los miembros de las diversas comunidades étnicas. El último desafío de la intervención del Centro Shalom es lograr que las partes implicadas en el conflicto participen de lo que llamamos Laboratorio para la Resolución de Problemas,  con el fin de lograr un acuerdo de paz.

CAUSAS DE CONFLICTO

Las causas de conflicto en éste área son complejas: por ejemplo, la diversidad étnica y la escasez de recursos hídricos y de pasturaje, que se acentúan con los cambios climáticos, lleva a la exacerbación de las tensiones entre los grupos étnicos.

La ausencia de claridad sobre las fronteras de los países, la escasa inversión estatal en la región, la convicción ya legitimada que se puede asesinar personas de un grupo étnico diverso al suyo, son las importantes fuentes de conflictos.

Últimamente, la presencia de extranjeros interesados en el pastoreo en zonas fronterizas, ofrece una ulterior causa de conflicto.

Si a todo ésto le agregamos la facilidad para obtener armas de fuego y municiones, se comprende por qué el conflicto se mantiene en el tiempo en un espiral de violencia y de venganzas.

En el pasado, los conflictos se resolvían con las armas tradicionales y la negociación. Hoy, se dispone de armas más sofisticadas que causan grandes lesiones y  una gran cantidad de muertes, lo que hace más difíciles las negociaciones. Aunque las armas ilegales no son las que causan los conflictos, ellas contribuyen a sostenerlos y a alimentar la espiral de violencia.

METODOLOGIA

El principio fundamental sobre el que se basa el Centro Shalom es que el conflicto no puede ser resuelto si no se interviene sobre las causas principales. Allí donde hay conflictos, las personas son asesinadas, mutiladas, desplazadas. En consecuencia, los valores religiosos y sociales de verdad, justicia, paz y misericordia no pueden hechar raíces.

Se dificulta lograr un desarrollo sostenible cuando los centros sociales, la iglesia, la escuela, los hospitales son periódicamente inutilizados. En tales circunstancias, las personas no pueden vivir una vida normal o una verdadera experiencia de paz.

En base a éstas consideraciones, el Centro Shalom sigue una doble aproximación para la resolución de los conflictos.

Por una parte, se buscan las causas profundas de los conflictos, por otra parte, se "adiestran" a los representantes de las partes en conflicto (separadamente, al principio) en técnicas de transformación de los conflictos y de edificación de la paz.

Esta doble aproximación ayuda a las partes involucradas en el conflicto, a abrirse y empeñarse en la colaboración necesária para la paz y la reconciliación. Esto les permitirá participar en lo que se llama "Laboratorio para la resolución de problemas", durante el cual se buscará de llegar a un acuerdo.

El trabajo de los representantes adiestrados en el Centro Shalom es el de utilizar sus propias competencias dentro de sus comunidades para prepararlas a participar en el "Laboratorio".

El director del Centro Shalom, Padre Patrick Devine, sma, describe ésta metodología afirmando que "no es una reparación rápida",  sino más bien, un fundamental proceso a largo plazo, que culminará con la implicación de los líderes étnicos, mediadors influyentes y actores estatales provenientes de la misma formación de transformación y resolución.

LA BÚSQUEDA

Académicos y personal calificado indagan sobre las causas del conflicto con el objetivo de facilitar los procesos de formación y sucesiva reconciliación, a la que se comprometen los líderes y los representantes de las comunidades implicadas.

La búsqueda identifica de qué modo la política, las directivas y prioridades del gobierno, sea local o nacional, pueden ayudar u obstaculizar la reconciliación. Las actividades de investigación pueden durar hasta 18 meses y no terminan hasta que sus resultados no son compartidos con los miembros de la comunidad de donde se recogieron los datos, y que participan de la última fase de su formación en el Centro. 

Esta investigación es la base para la predisposición de una hoja de ruta para la resolución de conflictos que será elaborada durante el dicho Laboratorio.

FORMACIÓN

La formación en el Centro Shalom está a cargo de un equipo keniano y de un staff internacional del Centro, entre los cuales están los Padres Ollie Noonan y Patrick Devine, ambos, misioneros sma.

Es una formación en tres módulos. Cada uno de ellos dura dos o tres días, y están distribuídos en un período que dura unos 18 meses (éste tiempo incluye también, el trabajo de investigación sobre las causas profundas del conflicto).

Primer módulo de formación: escucha de la experiencia de las personas en conflicto y sucesivamente, observación de los diversos modelos para comprender los conflictos y cómo gestionarlos. El workshop se ocupa de la transformación de los conflictos, explicando la necesidad de una trasnformación personal, relacional, estructural y cultural, y también presenta los procesos de reconciliación de la sociedad dividida.

Segundo módulo de formación: se propone presentar los principios de análisis de los conflictos y de la negociación. Presenta a los participantes, los componentes de la reconciliación: verdad, justicia, misericordia y paz.

La formación impartida en el primer módulo se propone furnir una comprensión del conflicto y la competencia para la gestión del mismo. Esto permite analizar la propia situación y lograr una nueva visión del conflicto como alternativa a la violencia.

Durante el Laboratorio, los participantes pueden expresar sus sentimientos, rabia, resentimientos hacia comunidades específicas, evidenciar los problemas o las estructuras de la comunidad que, según su parecer, causan o favorecen el conflicto. Se trata de un paso positivo para los participantes, porque la reconciliación inicia sacando a la luz las cuestiones de base del conflicto.

Tercer módulo de formación: se centra en la aplicación de las habilidades y competencias, aprendidas en los dos primeros módulos, a la situación local. Parte de éste módulo es dedicado a la presentación y a la validación de los resultados de la investigación.

Los participantes son consultados a fin de confirmar o no, los resultados de la investigación sobre la causa de los conflictos. La primera vez que se llegó a ésta etapa fue en agosto del 2013, cuando se validaron los resultados de la investigación sobre el conflicto entre los Samburu y los Turkana. 

El Centro Shalom fue al encuentro de la comunidad Samburu para verificar si los resultados de los análisis encontrados a partir de los datos recogidos, eran correctos. Durante la consulta, la comunidad escuchó los resultados, esclareció algunos aspectos y evidenció algunas omisiones.

Todos esos resultados son integrados en un documento final que será puesto a disposición de las parten en conflicto, del Estado, de los grupos religiosos, y de las ONG.
Por consiguiente, éste documento, será la base para el proceso de resolución del conflicto indentificando sus causas profundas, o sea, las cuestiones que deben ser afrontadas para resolverlo.

FASE SIGUIENTE
La conclusión y la validación de la investigación, marca el inicio de la fase siguiente del proceso de resolución del conflicto, que prevé la implicación de quienes han completado la formación y que comenzarán a trabajar en el interior de sus propias comunidades. 
Su responsabilidad es la de preparar a sus comunidades para participar en el Laboratorio para la Resolución de Problemas durante el cual, las partes implicadas en el conflicto se empeñarán en definir un acuerdo de reconciliación.

La duración de ésta fase no está definida, porque requiere que la comunidad local se familiarice con el proceso, aumentando la propia conciencia sobre la necesidad de una reconciliación y los beneficios que resulta de ello; también se requiere identificar y preparar a aquellos que participarán en el Laboratorio para la Resolución de Problemas.
Además de la participación de las partes implicadas en el conflicto, también es esencial implicar a los líderes étnicos, a los ancianos de la comunidad en conflicto, a los mediadores, a los funcionarios estatales y políticos, a los funcionarios de gobierno, a los líderes religiosos, a la policía, a la escuela, a los docentes, a los operadores sanitarios, etc. Todos éstos actores tienen un rol importante en la zona de conflicto. Sin su participación y cooperación no será posible implementar ningún acuerdo alcanzado.

LABORATORIO PARA LA RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS
Todos los pasos anteriores, o sea, la investigación, la formación y la preparación a nivel local culminan en el Laboratorio. La exacta estructura y sincronización del Laboratorio serán determinados por la situación local y el grado de preparación de la comunidad y de sus representantes. 

Probablemente se necesite un largo período de tiempo que requerirá múltiples encuentros y discusiones, no sólo directamente con las partes implicadas, sino también con las personas del gobierno nacional y local para garantizar que la política, los planos, el desarrollo y el uso de los recursos sirvan de soporte a la reconciliación.

Finalmente se realizará un proyecto de acciones para la paz que deberá ser actuado y monitoreado, y que llevará no sólo al cese de la violencia, sino también a una situación de justicia y de paz.

LOS NIÑOS Y LA ESCUELA
Otra de las actividades desarrolladas en el Centro Shalom es la promoción de la resolución de conflictos a través de la escuela. Esta iniciativa aspira a desarrollar escuelas primarias y secundarias inter étnicas. Las escuelas que participan del proyecto son provistas de iluminación con paneles solares. Se trata de promover un ambiente de paz, donde los niños puedan aprender y donde los rencores y las barreras entre los diversos grupos, puedan ser abatidas.

La luz es necesaria porque gran parte de las actividades didácticas se desarrollan al final de la jornada, cuando ya no hay luz natural. Hasta ahora participan más de 50 escuelas. El Centro Shalom reconoce el importante rol de la escuela para la creación de un ambiente favorable al aprendizaje y al estar juntos.

Actualmente el Centro Shalom desarrolló un módulo denominado "Educación a la paz", compuesto de catorce lecciones distribuídas en un semestre (está experimentándose en cuatro escuelas). El trabajo con la escuela y los niños se desarrolló con la formación de los adultos en la zona de conflicto. El desafío, en ambos casos, es construir gradualmente, la aceptación y el compromiso con el proceso de reconciliación en una comunidad más amplia y prepararse para vivir el Laboratorio para la Resolución de Problemas.

CONCLUSIÓN

La paz no es solamente la ausencia de violencia, ella también incluye la reconciliación. En otras palabras, tiende a crear una situación en la que las partes en conflicto se vuelvan recíprocamente interesadas en crear la armonía y la cooperación necesarias, para que sea posible un verdadero desarrollo. El documento Africa Munus, del 2011, exortación apostólica post sinodal del Papa Benedicto XVI en el último Sínodo de Obispos Africanos, evidencia la conexión entre la reconciliación y el desarrollo: "La reconciliación supera la crisis, restituye la dignidad a las personas, y abre la puerta al desarrollo y la paz duradera entre los pueblos, y a todos los niveles" (nº 21). 

La visión del Centro Shalom al trabajar para que prevalezca la paz, la justicia social y la reconciliación, refleja ésta conexión de la que habla el citado documento. 

El trabajo del Centro, además de ser motivado por la llamada del Evangelio a amar al prójimo, es guiado por la Doctrina Social de la Iglesia.

(Artículo tomado de la Comisión de Justicia, de la SMA de Irlanda)