jueves, 4 de diciembre de 2014

CONSEJO INTERRELIGIOSO FEMENINO (WIC)

Algunas de las Hnas nsa en Nigeria se ocupan de la promción de la paz y trabajan en el Foro Interreligioso de la Asociación de Mujeres Cristianas y Musulmanas, denominado WIC: Consejo Iterreligioso Femenino.

Este es un organismo no gubernamental y sin fines de lucro fundado en el 2010 en Kaduna, uno de los numerosos estados nigerianos. La intención es poder extender ésta actividad a los otros estados de Nigeria.
El Foro reúne líderes y miembros de grupos religiosos femeninos de Kaduna con el fin de afrontar a través de instrumentos pacíficos, los conflictos y las preocupaciones relacionadas con la pobreza cotidiana de las mujeres.

Su trabajo quiere ser un punto de partida para la profundización del deseo de trabajar para la convivencia interreligiosa y el mayor protagonismo de las mujeres en cuestiones de seguridad nacional e internacional. En éste cuadro de acción el WIC,  busca despertasr interés, a través del análisis y la resolución de conflictos, la comprensión y la colaboración interreligiosa y para los problemas de género que son obstáculos para que las mujeres asuman su rol de contrructoras de paz en la sociedad.
Se quiere ofrecer a las líderes de  las organizaciones religiosas femeninas, la posibilidad de encontrarse y de mantener un díalogo sincero y concreto para construir juntas la paz, en el respeto de la diversidad de fe religiosa.
Los problemas a afrontar son muchos. La realidad de la sociedad violenta de hoy, es uno de ellos, así como las guerras con trasfondo étnico y religioso. Por ésto el trabajo del foro es de extrema importancia.
En los últimos años el rol de la religión en la resolución de conflictos goza de mayor consideración, aunque se dio poca importancia a la dimensión femenina, debido, en gran parte, a la invisibilidad de sus esfuerzos.
En todas las tradiciones religiosas las mujeres son marginadas de los espacios religiosos formales y raramente ocupan roles de liderazgo, lo que significa que no reciben el reconocimeinto debido.
Esta marginación tiene un lado positivo: la mujer está libre de los vínculos institucionales, y les ha permitido trabajar creativamente en la promoción de la paz.
 El modo distinto de accionar de las mujeres, escondido, original y descreto le permite penetrar en ambientes difíciles, impulsar manifestaciones no violentas y movilizar comunidades enteras. Pero la situación de ellas, en la sociedad, sigue siendo injusta.
Se está pidiendo a las organizaciones internacionales, de crear agrupaciones de mujeres constructoras de paz con la contribución de asociaciones religiosas y culturales. Al mismo tiempo, se podría informar mejor a las organizaciones internacionales, sobre la labor de las mujeres en la promoción de la paz, y el modo en que podría ser reconocido.

Tales esfuerzos podrían ayudar a la causa de la promoción de la paz y de nuestra comprensión de lo que podría realizarse para que sea más profunda y duradera.

Resumiendo se podría decir que los objetivos del WIC son tres: 
1- Proporcionar un foro para dirigentes y miembros de organizaciones religosas femeninas musulmanas y cristianas que les permita reunirse en un diálogo sincero y concreto.
2- Activar grupos religiosos de mujeres cristianas y musulmanas, para trabajar juntas en el proceso de la construcción de la paz y resolver los problemas que causan los conflictos.
3- Facilitar la organización religiosa femenina cristiana y musulmana para trabajar juntas afrontando concretamente la poblemática cotidiana de la mujer.

Este es uno de los tantos ejemplos de las contribuciones de las Hermanas nsa en Nigeria. Porque la PAZ ES UN DON PRECIOSO PARA TODOS!
Unos de los deseos más profundos de la humanidad es poder vivir en paz, en familia, en sociedad.
Lo que a menudo no entendemos, es que la paz no es solamente el trabajo de los gobiernos, de los diplomáticos, de la ONU. Sino que es responsabilidad de cada uno/a de nosotros/nosotras.
Es fácil ser amante de la paz, pero es mucho más difícil ser promotores/as activos de la paz. 
Todos/todas podemos ser constructores de paz en nuestro pequeño mundo cotidiano: familia, amigos, conocidos, vecinos...Sólo necesitamos la voluntad de cumplir con nuestra parte: cada uno/a de nosotros/as está llamado a ser promotor/a de paz en el medio en que vive, con los distintos dones y posibilidades que cada uno/a posee y tiene a su alcance.

"Señor, hazme un instrumento de tu paz!" (San Francisco de Asís)

Hna. Kathleen Mc Garvey, nsa
  
(Artículo traducido de la Revista Regina Apostolorum, setiembre 2014)


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