"MUÉSTRANOS, SEÑOR, TU MISERICORDIA.."

Oran, enero 2017.

A la familia, a los amigos y amigas…

Esta carta, un poco más larga, prometida a la familia, a los amigos y amigas, llegará un poco atrasada, pero por internet irá más rápido que si la despacho en el correo. In sha Allah!


Alegría para el mundo! ALEGRÍA que nadie nos podrá quitar en éste mundo de indiferencias, sin piedad para algunos! Que nuestra vida lleve la marca de la empatía, de la compasión, de la misericordia, a ejemplo de nuestro Papa Francisco. Que ante el Niño Jesús, brote en nuestros corazones la siguiente invocación: "Muéstranos, Señor, tu misericordia y danos tu salvación" (Salmo 85, 8)

Ya hace más de un año que estoy en Argelia, y después de haber pasado varios meses en Hennaya, que es como un pueblo grande o una pequeña ciudad de 40 mil habitantes, desde mayo, estoy en Orán.

Me acostumbré fácilmente a Argelia y su gente. Sin dudas, se preguntan qué "hago", ya que aún en la edad de estar jubilada, hay que trabajar. Se necesita paciencia para encontrar su lugar, ver la manera en que puedo ayudar a la comundiad, a la diócesis, a la iglesia y al país donde fuí enviada.

En Hennaya, tuve la oportunidad de hacer algunos tratamientos de enfermería, sea en nuestra casa o a domicilio, colaborar en clases de conversación para ayudar a que mejoren en francés, y desde que estoy en Orán, colaboro con el obispo y la diócesis, así como en la comunidad, donde ayudamos a muchas familias en sus diversas necesidades. 

Los migrantes son numerosos y el Centro Pierre Claverie (centro diocesano) es un punto central para ellos donde se les brinda: ayuda, cuidados de salud, acompañamiento... 

Dos veces por semana, aseguro una media jornada (4 horas) en el servicio de acogida de éste Centro.

Ésta presencia en la recepción y acogida me gusta mucho, porque me permite encontrar muchas personas: las que vienen a seguir cursos de formación femenina (12 talleres diferentes), los estudiantes que acuden para el apoyo escolar o para mejorar el francés, en vista a los exámenes.

En la recepción encontramos también, personas de todo tipo de situación social que vienen para pedir información, personas en situación de pobreza, los grupos que vienen para pedir una sala donde reunirse, los migrantes que pasan porque saben que haremos todo para ayudarlos...

En la comunidad de Hermanas nsa, en Orán, somos tres: Hna. Sandra, una joven italiana, y dos francesas bretonas, Marie Claude y yo misma.

Quiero compartir con ustedes algunas experiencias y gestos vividos por unas y otras, de modo a mostrarles el ambiente en que vivimos, y que ponen en evidenca las cualidades del pueblo argelino.

La hna. Marie Claude, nos cuenta algo que yo también viví: "Una joven, cuya familia tiene dificultades para llegar a fin de mes con sus economías, se preocupa por el matrimonio de la mayor, cuya fecha se aproxima. 

Fué entonces que una amiga nuestra, pasa por la recepción cuando yo estaba allí. Sabiendo de su generosidad, le explico el caso.

Dos días después, ésta amiga, que tiene algunas dificultades para desplazarse, me llama y me pide acompañarla al centro de la ciudad. Regresamos con el auto lleno: un ajuar que la novia nunca imaginó!"

La hna. Sandra, enfermera, logra obtener, para los migrantes que llegan en situaciones deplorables,  citas con el doctor y servicios de salud gratuitos, reducciones del 50 % para las radiografías, para los análisis de laboratorio...

En cuanto a mí, el sábado, durante mi permanencia en la recepción del Centro Claverie, algunos días después del fallecimiento del Padre Jacques Hamel, llegaron dos hombres y me preguntaron si hay una iglesia en Orán y dónde está...? 

Así que les mostré la iglesia...ellos me dicen que algunos amigos musulmanes argelinos que viven en Francia, los llamaron por teléfono para darles la noticia de la muerte del Padre Jacques, y para decirles que el Imans los animó a asistir a la Misa y a los momentos de oración, de manera a ser solidarios con los cristianos!". Me preguntaron si teníamos una celebración o un momento de oración el domingo, y si podían participar...

Al inicio de la Misa, el celebrante, a quien le había explicado todo ésto, pudo explicar a la asamblea, el deseo de éstos dos hombres y les dio la bienvenida, ya que en realidad, eran numerosos, tanto hombres como mujeres, y al final de la Misa, pudimos saludarlos y conversar con ellos...

Tuve la suerte de ser invitada por el Hospital de Orán a dos días de encuentro internacional sobre: "Etica y situación de discapacidad". 

Fué muy interesante: numerosas intervenciones de médicos, pero sobre todo, talleres sobre algunas enfermedades que provocan discapacidad, como la esclerosis en placas, el parkinson. Los talleres fueron dados por personas, algunos, médicos, que sufren de éstas enfermedades.

En las jornadas participaron muchos médicos jóvenes, y tal como lo decía en las conclusiones uno de los responsables de las Jornadas: "Me alegra ver tantos médicos jóvenes interesados por éstas jornadas, pero otra cosa también me da mucha alegría, es la importante participación de numerosas mujeres. Es el futuro."

Estoy feliz y muy a gusto en éste país donde descubrimos y vivimos con personas hospitalarias, generosas, simples, abiertas a los otros...También los problemas son numerosos, como en todos lados, pero toda la población aspira a la paz.

El año anterior, Argelia no tuvo invierno...la naturaleza y los cultivadores sufrieron bastante: todo estaba seco, color amarillo como la paja, pero éste año, disfruto del invierno argelino; aunque en Orán hace frío y es húmedo, en otras partes,  la nieve y las tormentas son causa del cierre de unas 2900 escuelas...Todavía un poco de paciencia, y pronto veremos asomar la primavera.

Y como apenas estamos a fines de enero, aprovecho para desear que éste año traiga al mundo, a nuestros países y  familias,  la Paz y que cada uno, cada una, sea un instrumento de esa paz.

      Con toda mi amistad,

Chantal Dartois, nsa.