adjame, 07 septiembre del 2014.
Bendigamos al Señor que en su bondad a puesto su mano sobre la Hermana Marie.Raymonde Assoukpou Lobabie, desde 1954.
El hizo de ella "su instrumento" en diversos países.
El le dió una buena salud. Salud que le permitió dar gracias a Dios, con sus Hermanas nsa, cons sus familiares, sus amigos, sus bienhechores, la parroquia. Todo ésto sucedió el pasado 07 de septiembre del 2014, en las vísperas de la Natividad de la Santa Virgen María.
Reconozcamos que pese a su edad, la presencia de la Hna. en la comunidad de Adjamé, es de gran importancia. Ella está realmente presente en la comunidad como enla pastoral. Y ésto le valió un homenaje especial.
Para festejar ese maravilloso don del Señor, el Jubileo de 60 años de fidelidad, las celebraciones se desarrollaron desde el miércoles 03 de septiembre. Se llevó a cabo un programa de animación misionera: rosario misionero, catequesis, testimonio, concierto. Lo que permitió que las Hermanas Misioneras de Nuestra Señora de los Apóstoles, sean mejor conocidas.
Seguidamente, las Hermanas que llegaron de diferentes comunidades de la Región de Costa de Marfil, manifestaron su alegría y su agradecimiento a María Raymunda, que es la primera Hermana del grupo "Atchan", primera Hermana Ebrie.
Seguidamente, las Hermanas que llegaron de diferentes comunidades de la Región de Costa de Marfil, manifestaron su alegría y su agradecimiento a María Raymunda, que es la primera Hermana del grupo "Atchan", primera Hermana Ebrie.
El sábado 7 de setiembre, sólo se celebró una Misa en la parroquia San Michel de Adjamé. Ella fue presidida por su Excelencia Monseñor Paul DAKOURY TABLEY, obispo emérito de la diócesis de Gran Bassam.
Quisiéramos señalar algunos aspectos más significativos de la celebración.
Estaban presentes algunos personas de su generación, sobrinos, sobrinos nietos, etc.
Durante la procesión de ofrendas, cada lugar de misión de la Hermana fue representado por un elemento específico caracterizando al pueblo que la recibió. Esto, para explicar el amor, la alegría, la colaboración que Marie Raymonde vivió en medio de esos pueblos.
Finalmente, para agradecer a Nuestra Señora de los Apóstoles, de presentaron dos grupos de 60 niños, que en procesión, llevaban 60 rosas y 60 velas.
Fue una alegría inmensa para nosotras, las más jóvenes, que en ésta ocasión pudimos comprobar que el trabajo en la Viña del Señor, nunca es una pérdida. Pues, después de 60 años entregados en el servicio del Señor y en la misión, la hna. Marie Raymonde, continúa brindando sus dones y actitudes que son muy bien apreciadas, sobre todo por los jóvenes: acogida, disponibilidad, servicio, alegría, oración, escucha, compasión, atención a los otros...
Para nosotras, nuestra Hermana mayor, es una biblioteca delante la cual no se puede pasar con indiferencia.
Que el Señor siga bendiciéndola y sosteniéndola en su apostolado. Y le regale la gracia de la fidelidad a su amor, hasta el final de sus días.
Quisiéramos señalar algunos aspectos más significativos de la celebración.
Estaban presentes algunos personas de su generación, sobrinos, sobrinos nietos, etc.
Durante la procesión de ofrendas, cada lugar de misión de la Hermana fue representado por un elemento específico caracterizando al pueblo que la recibió. Esto, para explicar el amor, la alegría, la colaboración que Marie Raymonde vivió en medio de esos pueblos.
Finalmente, para agradecer a Nuestra Señora de los Apóstoles, de presentaron dos grupos de 60 niños, que en procesión, llevaban 60 rosas y 60 velas.
Fue una alegría inmensa para nosotras, las más jóvenes, que en ésta ocasión pudimos comprobar que el trabajo en la Viña del Señor, nunca es una pérdida. Pues, después de 60 años entregados en el servicio del Señor y en la misión, la hna. Marie Raymonde, continúa brindando sus dones y actitudes que son muy bien apreciadas, sobre todo por los jóvenes: acogida, disponibilidad, servicio, alegría, oración, escucha, compasión, atención a los otros...
Para nosotras, nuestra Hermana mayor, es una biblioteca delante la cual no se puede pasar con indiferencia.
Que el Señor siga bendiciéndola y sosteniéndola en su apostolado. Y le regale la gracia de la fidelidad a su amor, hasta el final de sus días.
EMMA VIDJANNAGNI, novicia nsa, en experiencia apostólica en la comunidad de Adjamé.
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