¿Es el mundo, realmente nuestra casa común? Cómo habitamos ésta tierra?
A continuación, trataremos de comprender los problemas en lo referente a ésta temática, para más tarde, buscar una solución.
El objetivo de la "Laudato Si":
"El objetivo no es recoger información o saciar nuestra curiosidad, sino tomar dolorosa conciencia, atrevernos a convertir en sufrimiento personal lo que le pasa al mundo, y así reconocer cuál es la contribución que cada uno puede aportar." (nº 19)
Este párrafo es el corazón del documento, se trata de comprender la profundidad de los problemas que lastiman nuestro mundo, apropiarnos de éstos problemas a través de un camino de discernimiento que nos lleve a ver la urgencia y a sentirla en nuestra propia piel, y finalmente, decidirse a actuar localmente y en lo cotidiano, de manera a generar cambios.
En el primer capítulo se viene mostrando lo que el Papa llama "El grito de la tierra es el grito de los pobres" (nº 49) donde desde el inicio al fin, aparece un vínculo entre las cuestiones ambientales y las cuestiones sociales. Emerge en toda la encíclica, la aproximación llamada "Ecología integral" que regula conjuntamente, las relaciones entre los sistemas naturales y los sistemas sociales ("grito de la tierra" y "grito de los pobres" van de la mano). La "Laudato Si" enfrenta las dos cuestiones de una manera nueva. Antes que nada, no hace una única pregunta, y subraya que los problemas ambientales son vividos en primera persona por los más pobres.
El punto de vista es el del colapso del mito del CRECIMIENTO ILIMITADO, que durante años nos hizo creer que nada de lo que el planeta ofrece se agota. Desde hace años que consumimos lo que ya no se regenerará jamás. Una pequeña parte de los habitantes del mundo ha consumido y consume casi la totalidad de los recursos disponibles!
Lo que significa que los países ricos hemos consumido nuestros recursos disponibles y además, también consumimos los recursos de los países más pobres.
En éste sentido el Papa habla de "deuda ecológica hacia los países pobres".
El crecimiento ilimitado es un mito y estamos en deuda con la tierra y con los más pobres.
Repensar el valor del bien común y tener mayor conciencia de ello.
Hay numerosos ejemplos sobre ésto en el primer capítulo de "Laudato Si". El Papa Francisco presenta la compleja situación ecológica de nuestro tiempo:
El primer capítulo de la encíclica no es solamente una lista de problemas, sino un nuevo punto de vista desde donde debemos partir para releer todas las dificultades presentadas.
Qué hacer frente a todo ésto?
Reconstruír una nueva relación con la tierra, con las personas y con Dios.
En tanto que cristianos estamos llamados a escuchar los dos clamores: el proveniente de la naturaleza y el que proviene de nuestros hermanos y hermanas más pobres, que nos llaman a construír justicia entre ambos (justicia socio-ambiental). Ya no más asistencialismo y limosna, sino, procesos de liberación del mal que aqueja a la tierra y a sus creaturas.
Hermana Giuliana Bolzan, nsa.
Artículo traducido de la revista de las Hermanas nsa de Italia, "Regina Apostolorum", septiembre 2016. https://issuu.com/nsaitalia.org/docs/ra_2_2016
A continuación, trataremos de comprender los problemas en lo referente a ésta temática, para más tarde, buscar una solución.
El objetivo de la "Laudato Si":
"El objetivo no es recoger información o saciar nuestra curiosidad, sino tomar dolorosa conciencia, atrevernos a convertir en sufrimiento personal lo que le pasa al mundo, y así reconocer cuál es la contribución que cada uno puede aportar." (nº 19)
Este párrafo es el corazón del documento, se trata de comprender la profundidad de los problemas que lastiman nuestro mundo, apropiarnos de éstos problemas a través de un camino de discernimiento que nos lleve a ver la urgencia y a sentirla en nuestra propia piel, y finalmente, decidirse a actuar localmente y en lo cotidiano, de manera a generar cambios.
En el primer capítulo se viene mostrando lo que el Papa llama "El grito de la tierra es el grito de los pobres" (nº 49) donde desde el inicio al fin, aparece un vínculo entre las cuestiones ambientales y las cuestiones sociales. Emerge en toda la encíclica, la aproximación llamada "Ecología integral" que regula conjuntamente, las relaciones entre los sistemas naturales y los sistemas sociales ("grito de la tierra" y "grito de los pobres" van de la mano). La "Laudato Si" enfrenta las dos cuestiones de una manera nueva. Antes que nada, no hace una única pregunta, y subraya que los problemas ambientales son vividos en primera persona por los más pobres.
El punto de vista es el del colapso del mito del CRECIMIENTO ILIMITADO, que durante años nos hizo creer que nada de lo que el planeta ofrece se agota. Desde hace años que consumimos lo que ya no se regenerará jamás. Una pequeña parte de los habitantes del mundo ha consumido y consume casi la totalidad de los recursos disponibles!
Lo que significa que los países ricos hemos consumido nuestros recursos disponibles y además, también consumimos los recursos de los países más pobres.
En éste sentido el Papa habla de "deuda ecológica hacia los países pobres".
El crecimiento ilimitado es un mito y estamos en deuda con la tierra y con los más pobres.
Repensar el valor del bien común y tener mayor conciencia de ello.
Hay numerosos ejemplos sobre ésto en el primer capítulo de "Laudato Si". El Papa Francisco presenta la compleja situación ecológica de nuestro tiempo:
- La polución, es considerada en sus diversas formas (agua, aire, suelo, civil e industrial). Su impacto en la salud humana y en la naturaleza, con una preocupación particular por la creciente producción de deshechos. Se habla de "la cultura del descarte", en el nº 22 se subraya que ésta cultura afecta tanto a las personas como a las cosas, y que ambos, velozmente, se convierten en basura.
- Los cambios climáticos son "un problema global y uno de los desafíos actuales más urgentes para la humanidad." Se habla de los "migrantes ambientales" que son aquellas personas que se ven obligadas a dejar su país, debido a los cambios climáticos que lo afectan y de los que nadie habla.
- Las problemática del agua que es un recurso natural primario para el ecosistema, además de un derecho humano fundamental y universal para la supervivencia. Se remarca que no puede ser reducida a mercadería y puesta bajo las leyes del mercado, sino que debe estar en el centro de las políticas públicas que deberían permitir que éste recurso llegue a todos, especialmente a las poblaciones más pobres.
- La pérdida de biodiversidad. Cada año, desaparecen miles de especies vegetales y animales, y casi todas se extinguen por razones que tienen que ver con alguna actividad humana. Se describen una por una las principales áreas críticas: ecosistema, bosques, acuíferos, glaciares, océanos, barrera de coral. El Papa subraya que la naturaleza y sus recursos tienen un valor en sí mismos y no sólo son cosas para usar.
- La desigualdad planetaria. "El ambiente humano y el ambiente natural de degradan al mismo tiempo." (nº 48) En ambos, casi siempre los más afectados son los más débiles. El actual modelo de vida no funciona porque una minoría se cree con el derecho de consumir los recursos y el ambiente natural de los más pobres.
- La grave degradación ambiental está estrechamente relacionada con el deterioro de la calidad de vida y la degradación social a nivel mundial.
El primer capítulo de la encíclica no es solamente una lista de problemas, sino un nuevo punto de vista desde donde debemos partir para releer todas las dificultades presentadas.
Qué hacer frente a todo ésto?
Reconstruír una nueva relación con la tierra, con las personas y con Dios.
En tanto que cristianos estamos llamados a escuchar los dos clamores: el proveniente de la naturaleza y el que proviene de nuestros hermanos y hermanas más pobres, que nos llaman a construír justicia entre ambos (justicia socio-ambiental). Ya no más asistencialismo y limosna, sino, procesos de liberación del mal que aqueja a la tierra y a sus creaturas.
Hermana Giuliana Bolzan, nsa.
Artículo traducido de la revista de las Hermanas nsa de Italia, "Regina Apostolorum", septiembre 2016. https://issuu.com/nsaitalia.org/docs/ra_2_2016
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